Cálculo del finiquito

En nuestro equipo de abogados laboralistas también le ayudaremos en cuanto al cálculo del finiquito. Este concepto alude al pago que habrá de realizar la empresa al trabajador, una vez se haya acabado la vinculación laboral entre ambos. Frecuentemente se confunde el término con el de indemnización, aunque no son iguales. La indemnización corresponde al monto que deberán recibir los empleados, cantidad que variará en función de diversas circunstancias y que está fijada en el Estatuto de los Trabajadores.

El finiquito puede incluir:

• Salario no pagado.
• Salario devengado.
• Vacaciones pendientes.
• Pagas extras y otro tipo de pagas específicas.

En cuanto a las pagas, deberán considerarse diferentes aspectos, entre otros si se trata de pagas prorrateadas. También pueden darse otros motivos para la variación y la obtención de la cuantía de pagas incluidas en el finiquito, como por ejemplo pluses. Todos estos conceptos deberán estar incluidos en el Convenio Colectivo.

En la mayoría de los casos, a los trabajadores les resulta difícil comprender la esencia de determinados conceptos, así como estar seguros si el finiquito que le presenta la empresa, está correctamente realizado.

Para estar tranquilo y obtener los derechos que prevé la Ley, el trabajador deberá contactar con un abogado especialista en Derecho Laboral. Los letrados laboralistas están al tanto de los cambios en las leyes, de cuanta excepción pueda beneficiarle, de todos los conceptos mediante los cuales conseguirá ver sus derechos respetados.

El finiquito como concepto se vincula a despido, y el despido es una situación traumática para muchas trabajadoras y trabajadores. La labor de nuestro despacho no es solo actuar legalmente, sino también informarle desde el primer momento, de su situación.

De este modo, la víctima del despido se encontrará más orientada y sobre todo amparada en un ámbito que está relacionado con aspectos de corte humanitario. Un despido improcedente o un finiquito mal calculado, pueden repercutir no solo en una peor calidad de vida del trabajador, sino de toda su familia, con todo lo que ello supone.